Del 1 al 4 de septiembre, Kiev se convirtió nuevamente en la sede de la Semana de la Moda Ucraniana (Ukrainian Fashion Week, UFW), un evento que no solo destaca por ser un escaparate de las últimas tendencias, sino por su potente mensaje de resistencia. Esta edición marca el regreso de UFW a la capital ucraniana, después de dos años de ausencia debido a la guerra.
La última vez que este evento se celebró en Kiev fue en 2022, antes de que la invasión rusa cambiara la vida del país. Ahora, tras varias ediciones en ciudades como Londres, París o Berlín, los diseñadores ucranianos vuelven a presentar sus colecciones en su tierra natal, en un contexto lleno de significados. Para la moda ucraniana, esta edición es mucho más que desfiles y pasarelas.
Ukrainian Fashion Week ha sido un pilar fundamental en la promoción de diseñadores emergentes a nivel global, con una presencia constante en los principales circuitos de la moda internacional como París, Milán y Nueva York. A lo largo de los años, esta plataforma ha permitido a jóvenes talentos transformar sus marcas en nombres consolidados a nivel mundial, a pesar de los desafíos que enfrenta el país. La misión de UFW siempre ha sido clara: construir un futuro sólido para la moda ucraniana, haciendo que sus creadores sean reconocidos en todo el mundo.
Esta edición en Kiev, que contará con la participación de alrededor de 50 marcas, entre ellas nombres tan renombrados como Ksenia Schnaider y Ruslan Baginskiy, tendrá como epicentro el Museo Nacional de Arte y Cultura Mystetskyi Arsenal. Este icónico lugar acogerá la mayoría de los desfiles y presentaciones, creando un ambiente en el que la moda se fusiona con el arte y la cultura. Además, grandes marcas como Mini y Kronenbourg han decidido apoyar el evento como patrocinadores principales, subrayando la importancia de la moda ucraniana en el panorama global.
El respaldo también llega desde las más altas esferas del país: la Primera Dama de Ucrania, Olena Zelenska, ha participado activamente en la promoción del evento, reafirmando su apoyo a la industria de la moda de su país. Pero, más allá del glamour y los flashes, esta Semana de la Moda en Kiev representa la determinación de un país que sigue adelante a pesar de las adversidades. Tras tres temporadas en las que los diseñadores ucranianos tuvieron que adaptar sus desfiles a otras ciudades europeas, volver a presentar sus colecciones en su propio país es un gesto de fuerza y esperanza.
En un contexto en el que el conflicto sigue latente, la moda se convierte en una herramienta para mantener visible a Ucrania en el escenario internacional. Este regreso de UFW a Kiev no es solo una oportunidad para mostrar las últimas tendencias, sino un potente recordatorio de la capacidad de Ucrania para mantenerse fuerte y creativa, incluso en los tiempos más difíciles. Los diseñadores ucranianos no solo están confeccionando prendas; están tejiendo un futuro lleno de posibilidades para su país en la moda mundial.