Empresas como Airbnb han abierto el abanico de las maneras de hospedarnos en nuestras vacaciones. La compañía ofrece en su plataforma digital un sinfín de alojamientos, pero hay algunos que son, cuanto menos, sorprendentes.
Molino en Ponta Delgada (Portugal)
¿qué tal si nos alojamos en un molino de viento? Y si además está cargado de historia, mejor que mejor. Esta estructura portuguesa del siglo XIX ha sido reacondicionada para una estancia para el recuerdo. En su planta alta ofrece vistas de 360 grados de toda la zona que se pierden en el azul infinito del océano. A partir de 200 euros la noche.
Alojamiento en un iglú (Finlandia)
En Pelkosenniemi, un encantador iglú nos espera con Airbnb en una localización donde disfrutarás de las auroras boreales en su temporada. Tiene una única cama, o mejor dicho, saco de dormir sobre un somier de hielo. A partir de 130 euros la noche.
Cápsula de metal (Reino Unido)
Una fabulosa opción en la localidad escocesa de Drimnin para disfrutar de otro alojamiento desde el que contemplar el cielo. Esta suerte de cápsula denominada AirShip 2 fue en antaño una aeronave y cuenta con un ventanal panorámico en su extremo para gozar de unas vistas únicas al Sound of Mull. A partir de 188 euros la noche.
‘Caja de pájaros’ (Noruega)
En el municipio noruego de Gaular tenemos a nuestra disposición Birdbox. Dormiremos en pleno contacto con la gélida naturaleza de esta zona en invierno gracias a una ‘caja de pájaros’ de estética minimalista desde la que observaremos las montañas. Nos hospedaremos al lado de senderos donde también podremos esquiar. Desde 328 euros la noche.
OVNI
Los OVNI ya no abducen humanos. Ahora se prestan a que durmamos plácidamente en ellos. O eso parece con The UFO, un alojamiento en el sur de Pembrokeshire (Reino Unido) que no deja indiferente a nadie. Hasta contiene un monitor para juegos clásicos de temática espacial de los 80 como Space Invaders o Defender. Desde 204 euros la noche.
Casa Acantilado
En nuestro país, la villa Casa Acantilado nos abre sus puertas en Salobreña para dejarnos unas preciosas vistas al mar. Desde luego, nos encantan su ondulado y sinuosa tejado. Desde 519 euros la noche.
Casa con coco
Finalizamos con una vivienda muy tropical en Francia. Situada en Borgoña, esta cabaña, denominada Lov’Nid Passion, se postula como un perfecto nidito de amor encima de un árbol. ¿Lo sorprendente? Sin duda, que incluye una habitación con forma de coco. Desde 220 euros la noche.