Cientos de figurantes ataviados de antiguos egipcios tomaron las pirámides de Giza el pasado sábado para celebrar un evento histórico. Después de dos décadas de espera, por fin se ha inaugurado el Gran Museo Egipcio y la ceremonia de apertura ha sido un impresionante adelanto de lo que este museo depara en su interior.
Con la presencia de 39 jefes de Estado, reyes y príncipes y con representantes de otros 40 países más, el exterior del museo se tiñó de historia para regresar al Antiguo Egipto. Sin embargo, la ceremonia tuvo mucho más alcance del que parecía apreciarse a simple vista. Una conexión con una orquesta en Japón, otra acción en París, seguidas de otras con Río de Janeiro y Nueva York recordaron a los asistentes la universalidad de esta civilización.

Tras esto, se sucedieron enlaces con diversas zonas de Egipto como Luxor, Asuán o El Cairo resaltando la diversidad que reúne el país. La presentación culminó con un espectáculo de drones que exhibió en imágenes las joyas más importantes con las que contará el museo. El broche de oro de la noche fue la representación a través de drones de la máscara mortuoria de Tutankamón, que a partir de ahora podrá admirarse en el Gran Museo Egipcio.
Finalizado el acto, tuvo lugar una visita privada por el recinto para autoridades e invitados. Este museo es la mayor colección del mundo dedicada a una sola civilización y alberga más de 100.000 tesoros del Antiguo Egipto.

La apertura del Gran Museo Egipcio ha sido un momento muy esperado para el país puesto que ha sido un acto que se ha ido retrasando por diferentes causas. La Primavera Árabe, la pandemia del Covid-19 o el conflicto entre Israel e Irán fueron algunos de los motivos por los que este momento se retrasó.
Hoy, después de 20 años de espera y una inversión de 1.200 millones de dólares el museo por fin abrirá sus puertas al público. La fecha oficial de apertura está fijada para mañana, día 4 de noviembre, y la entrada costará entre 3 y 26 euros dependiendo de la tarifa.


