La ciudad californiana de Indio acogió de nuevo el festival de música Coachella, uno de los eventos más marcados en las agendas de los celebrities. Esta edición comenzó el pasado 14 de abril y acabará este fin de semana.
En el cartel de artistas invitados pudimos ver una gran presencia de cantantes hispanohablantes, con nombres que lo encabezaban como Bad Bunny, Kali Uchis o Rosalía, que interpretó su ‘discazo’ Motomami. También estrenaron escenario Becky G y Eladio Carrión, para asombro de muchos.
La gran parte de los artistas sorpresa acompañaron a los cantantes latinos, como Post Malone, que actuó junto al puertoriqueño y Rauw Alejandro, futuro esposo de Rosalía, que cantó con ella una de las canciones de su EP conjunto RR. También aparecieron durante otras actuaciones Tyler, The Creator o Natti Natasha.
El grupo de k-pop Blackpink repetía su presencia otro año más, compartiendo el foco con grandes como Björk, Charli XCX o Gorillaz. Frank Ocean, otro de los nombres grandes del cartel, actuó por primera vez desde 2017, un concierto que muchos de los fans estaban esperando.
Pero además de la música, lo que importa de Coachella son los outfits, donde el color y la extravagancia priman. Este año hemos podido ver conjuntos monocromáticos, el denim y el brillo con transparencias, unas tendencias totalmente motomamis, que ya podemos encontrar en casi todas las tiendas.
Vanessa Hudgens, considerada la reina de Coachella, no acudió este año, para sorpresa de todos, pero sí pudimos ver a otros famosos disfrutando del festival como Emma Chamberlain, Timothée Chalamet y Suki Waterhouse, entre otros muchos.