Te hemos hablado mucho de los concept car, pero ¿alguna vez has visto un art car? El fabricante francés Alpine y el colectivo de arte Obvious han presentado en el Grand Palais Éphémère un Alpine A110 con una decoración exclusiva.
El deportivo de la marca se ha convertido en una plataforma para explorar en su carrocería el potencial creativo de la inteligencia artificial, fomentando el diálogo entre tecnología y emociones. Obvious se inspiró en el legendario legado deportivo del fabricante para inventar y crear una pieza única que materializa una carrera imaginaria, una síntesis de todas las pistas de carreras en las que Alpine se ha lucido.
En la carrocería del icónico A110 hay un circuito imaginario generado gracias a la IA. Su estilo se inspira en el fenómeno sastrugi, cuando la nieve erosionada por el viento deja ondulaciones geométricas en el suelo. También es reseñable la fórmula matemática que existe grabada en la parte posterior del A110, a modo de firma de los artistas, que simboliza el algoritmo con el que el colectivo trabajó para generar la pista.
A través de la creación del circuito imaginario, la obra utiliza las capacidades del aprendizaje automático, que consiste en permitir que las computadoras ‘aprendan’ de los datos, y las GAN, una clase de algoritmos de aprendizaje no supervisados. Asimismo, los artistas se inspiraron en los circuitos que han marcado la historia de la marca, desde Le Mans hasta Paul Ricard, Pedralbes, Pescara, Montjuïc, Monsanto, Magny-Cours, Long Beach, Losail y Kyalami.
El resultado final, sin duda, nos encanta, y a buen seguro que a cualquier amante de los vehículos Alpine le encantaría lucir este diseño único, y muy tecnológico, al volante.